Como un acto de enorme maldad y perversión calificó el gobernador Miguel Barbosa Huerta el feminicidio cometido contra la activista y abogada Cecilia Monzón y que derivó en la detención del ex candidato a gobernador en el 2010 por el Partido Revolucionario Institucional (PRI) Javier N y otros implicados.
“Un delito que se fraguó, se concibió, se preparó, se ejecutó y después se llevó a cabo la huida de los responsables tiene todos los elementos de un delito en cuanto a responsabilidad, es un acto de enorme maldad y perversión de quienes lo cometieron”.
Desde Casa Aguayo, Barbosa Huerta reconoció el trabajo de investigación de la Fiscalía General del Estado y confió en que pronto se aplique todo el peso de la ley y aseguró que en Puebla nadie esta por encima de ella.
“Privar de la vida a alguien es un hecho que denota maldad y perversión y son conductas antisociales de momentos que pueden analizarse sociológicamente pero este caso es paradigmático de maldad y perversión”.
El Ejecutivo local criticó a Javier N -a quien nunca se refirió por su nombre-, por haber sido un hombre que detentó altos cargos públicos de poder y de representación ante las cámaras.
“Si hoy hicieron esto, que no habrán hecho cuando estuvieron en los cargos públicos, pero vienen de esa época en donde el poder servía para beneficiarse”.
En ese sentido el mandatario consideró que los servidores públicos que desempeñan cargos deben cuidar el poder, porque el poder es el cumplimiento de la ley.
“Quien se beneficia violando la ley no está ejerciendo el poder, está cometiendo delitos, abuso, por eso hay que cuidar el poder”.
Finalmente el gobernador reiteró su reconocimiento a la Fiscalía General del Estado por el trabajo realizado para aportar todas las pruebas que llevaron a la detención de los presuntos autores materiales e intelectuales del feminicidio de Cecilia Monzón.
