La inflación sigue siendo la principal preocupación de las economías en el mundo y lógicamente, México no es la excepción; en el caso de Estados Unidos tiene una inflación del 6.4% cuando la meta es de alrededor del 2%, es decir, muy fuera de la realidad; mientras que en el caso de México, el último dato de inflación fue de 7.91%, también alejado de la meta que es del 3%, mencionó Marcos Felipe Gutiérrez Barrón, profesor de la Facultad de Economía de la UPAEP.
En el caso de Puebla, se registró una inflación del 8.64%, la cual puso al estado por arriba de la media nacional. Pero el problema estriba en que debido a la inflación, se sigue incrementando el precio de los alimentos, aumentos sensibles en el precio del huevo y del pollo, dos de los principales productos que forman parte de la canasta básica, manifestó Gutiérrez Barrón.
Indicó que la inflación es un aspecto que afecta a los sectores más desprotegidos y débiles, a los sectores de menos ingresos y presenta un efecto todavía mayor porque origina un impacto y un costo social debido a las características que tiene el mercado laboral. Tenemos un mercado laboral muy frágil y de ahí que la inflación afecte de manera importante a los trabajadores.
De acuerdo a datos del INEGI, actualmente es necesario ganar tres salarios mínimos para poder comprar una canasta básica. Un segundo dato significativo es que cerca de 7 millones de mexicanos reciben cuando mucho un salario mínimo; y otros 3 millones no reciben ninguna remuneración y esto explica por qué 11 millones de trabajadores o personas, viven en pobreza extrema.
Marcos Gutiérrez expresó que más del 58% de las personas ocupadas están vinculadas con la informalidad, carecen de prestaciones sociales, 30 millones de trabajadores carecen de estas prestaciones a pesar de que existe un marco laboral y social vigente.
Agregó que cerca de 14 millones de trabajadores no tienen un contrato por escrito, situación que hace muy vulnerable y que sean desprendidos del trabajo sin que reciban ningún tipo de remuneración. Por eso, al tener este mercado laboral tan frágil, los aumentos en los precios afectan tanto y generan pocos beneficios para las personas.
En ese sentido, comentó que es urgente fomentar la formalidad e ir combatiendo la informalidad y en el caso de México, tiene un programa serio de informalidad laboral y es lo que genera la pobreza laboral.
Dijo que la expectativa es que la inflación continuará a lo largo de este año y posiblemente cerremos este año con una inflación del 5%, todavía por encima de la meta y no sería hasta el segundo trimestre del 2024 cuando converja la meta, es decir, todavía vamos a ver aumentos en los precios a lo largo de este año y principios del año siguiente.
En lo referente a la tasa de interés, dijo que es la herramienta de política monetaria que utiliza el Banco de México para controlar la inflación.
El Banco Central ha ido aumentando la tasa de interés con el propósito de combatir la inflación y actualmente la tasa de interés se ubica en alrededor del 11% y continuará aumentando de acuerdo a los analistas hasta el 11.5%.
En el caso de Estados Unidos, la Reserva Federal también tiene una tasa de interés que ha ido subiendo y que actualmente está en el 4.5% y todavía va a continuar al alza. El objetivo en el incremento de la tasa de interés es reducir la demanda agregada que es lo que está originando la inflación.
Advirtió que al incrementarse la tasa de interés se encarece el dinero, es más costoso el uso de la tarjeta de crédito, son más caros los préstamos y esto reduce de manera importante la demanda de consumo y, en consecuencia, se busca combatir la inflación.
Bajo estas circunstancias económicas recomendó no utilizar la tarjeta de crédito ni contratar deuda porque las tasas de interés están subiendo y los intereses se vuelven impagables.
Con respecto al crecimiento económico, el mundo y México, además de los riesgos geopolíticos que están presentes y que todas las personas pueden ver, aún prevalecen algunas restricciones en las cadenas de suministros que también están afectando la proveeduría sobre todo de microprocesadores, como es el caso de la industria automotriz en Puebla, que ha tenido que recurrir a paros técnicos por la escasez de microprocesadores, lo que afecta el crecimiento económico.
Por último, subrayó que México cuenta con finanzas públicas sanas, además de que están llegando inversiones extranjeras al país por la relocalización de las cadenas de suministro (nearshoring), las empresas que se van a establecer en el país y que serán las proveedurías del mercado norteamericano y que antes se encontraban en Asia y la entrega de remesas que rompieron récord el año pasado, le dan estabilidad económica al país.